La Policía ha calificado de "incidente terrorista" el ataque que se produjo este jueves cerca de una sinagoga de la localidad inglesa de Crumpsall, a las afueras de Mánchester. Los agentes fueron notificados sobre un atropello y un apuñalamiento en el área.
El jefe de Policía del Gran Manchester, Stephen Watson, comunicó que dos personas murieron como resultado del ataque, mientras cuatro más permanecen hospitalizadas tras sufrir diversas lesiones graves.
El sospechoso fue asesinado a tiros por los agentes siete minutos después de que fueran notificados sobre el incidente a través de una llamada, agregó. "Había una gran cantidad de fieles en la sinagoga en el momento del ataque, pero gracias a la valentía inmediata del personal de seguridad y de los fieles que se encontraban en el interior, así como a la rápida respuesta de la Policía, se impidió el acceso del atacante", declaró.
Watson explicó que "en este momento sabemos que un automóvil fue conducido directamente hacia los miembros del público", sin embargo, la multitud que presenció la escena alertó a la policía "tan pronto como vieron lo que estaba sucediendo".
Las investigaciones sobre el ataque "están avanzando a buen ritmo" y, hasta el momento, ha quedado confirmado que el atacante llevaba un chaleco "que tenía la apariencia de un artefacto explosivo". Watson solicitó a la población no compartir en línea contenido relacionado con el incidente, sino proporcionarlo a la Policía. Actualmente, la prioridad máxima es "mantener la seguridad pública", concluyó.