La nave que llevará seres humanos a Marte tendrá propulsión nuclear
Rusia construirá una planta de propulsión nuclear para vuelos espaciales para el año 2017, informó la Fundación Skólkovo, el Centro de Investigaciones e Innovación ruso, similar al 'Silicon Valley'.
Según el jefe de la División de Tecnologías Nucleares de la Fundación, Denís Kovalévich, la planta propulsora de un megavatio de potencia será diseñada para naves espaciales de vuelos de grandes distancias.
Según la información recogida en el portal ruso de noticias técnicas CNews, se trata de una planta propulsora con un impulso específico de 900-5000 segundos y con 1,5 a 3 años de autonomía. La potencia eléctrica del transformador de grupos turbogás se situará entre los 100 y 150 kilovatios. Aunque las dimensiones y el peso de la instalación no se detallan, se sabe que la planta propulsora tiene que encajar en el revestimiento de cohetes-propulsores Protón y Angará.
Los primeros sistemas del propulsor serán ensamblados el año que viene, en tanto que las pruebas estacionarias del primer prototipo se iniciarán en el 2014. Se prevé que la planta propulsora esté completamente disponible en el 2017.
Por su parte, la Agencia rusa de Energía Nuclear, Rosatom, informó que el desarrollo y construcción de una planta de propulsión nuclear para naves espaciales costará más 247 millones de dólares. Cabe destacar que en el 2010, el Gobierno ruso asignó 16,7 millones de dólares, mientras que los gastos totales para el proyecto de la nave propulsada por energía nuclear se estiman en más de 580 millones de dólares hasta el 2019.
En el 2003, la NASA empezó un proyecto análogo llamado Proyecto Prometeo, el cual supone el desarrollo de un reactor nuclear que manejaría un impulsor de iones eléctrico para dar energía a una sonda a Júpiter. El programa se 'tragó' hasta 430 millones de dólares en el 2005, pero fue cancelado un año más tarde.
Sin embargo, los especialistas siguen insistiendo en que los vuelos espaciales fuera de la órbita de la Luna requieren nuevas tecnologías y hasta ahora la única solución es desarrollar una planta propulsora para vuelos de largas distancias.
En el 2011, el jefe de Roscosmos, Anatoli Permínov, informó que los vuelos a Marte en los propulsores actuales podrían durar más de un año.
“Se precisa desarrollar una nueva planta propulsora para naves superpesadas. Rusia dispone de todas las tecnologías para desarrollar propulsores de esta clase”, aseguró.
Sin embargo, Permínov está convencido de que el primer vuelo al Planeta Rojo se efectuará no antes del 2035.