La administración de Obama busca recuperar la confianza de los hispanos
Muchos ciudadanos hispanos, que contribuyeron a la victoria de Barack Obama en las presidenciales de 2008, se sienten decepcionados por el presidente, sobre todo por considerar que se han convertido en el 'chivo expiatorio' de su política migratoria. Para recuperar la confianza de esta comunidad de cara a las elecciones de 2012, altos funcionarios del gobierno de Obama se reunieron con algunos de sus líderes en Miami en un intento de impulsar las prestaciones dirigidas a la comunidad latina.
La Casa Blanca aprovechó la reunión para fomentar un programa piloto que tiene el objetivo de ampliar las oportunidades de empleo para los hispanos y las prestaciones para las compañías que los contraten. Parte de esta iniciativa ya ha sido implementada y pequeños comerciantes afirman haberse beneficiado.
A pesar de que la nación registró un ligero descenso en la tasa de desempleo, del 8,6% actualmente, su nivel más bajo en los últimos tres años, el mismo índice entre los hispanos permanece en el 11,4%.
“En EE. UU. ya se han generado casi 3 millones de puestos de trabajo, pero dentro de nuestra comunidad hispana el desempleo sigue siendo demasiado alto y el presidente está haciendo todo lo posible para que se apruebe este proyecto de ley que pueda generar trabajo para los hispanos”, comentó Francisco Sánchez, subsecretario de comercio de EE. UU.
Esta no es la primera cumbre dirigida a los hispanos, sino que forma parte de una serie de encuentros auspiciados por la Casa Blanca que se llevan a cabo en el país desde julio. Sin embargo, la reunión cobra especial importancia en Florida, uno de los estados clave que podría ayudar a Obama ser reelegido.
Reforma migratoria: un dedo en la llaga latina
La reforma de inmigración es la piedra de toque para la comunidad latina. Ya pasaron tres años desde que Obama asumiera las riendas de EE. UU. y todavía no hay rastro de la reforma conocida como 'Dream Act', una promesa hecha en campaña con el objetivo de conseguir el voto latino. Cada vez son más las familias de inmigrantes que pierden a alguno de sus miembros debido a las deportaciones masivas, que se han convertido en la nueva política migratoria estadounidense.
"Yo veo deportaciones todos los días. La gente me llama y dice que los van a deportar en una semana, en un mes", cuenta a RT el activista Manuel Guerra Casas.
La administración Obama deportó en 2011 a casi 400.000 inmigrantes (la mayoría de ellos sin antecedentes penales y con familiares en el país), la cifra más alta en la historia del Servicio de Inmigración y Aduanas.
De la resolución del problema va a depender si los electores latinos acudirán a votar o no. "Lo que quiero ver en este momento es la aprobación del Dream Act y la posibilidad de que los estudiantes puedan acogerse a él para ser ciudadanos estadounidenses", subraya a RT el líder de estudiantes hispanos Jonathan Carmenate.