Kim Jong-un destacó este viernes el éxito de los "procesos de transformación social" guiados por la idea Juche y el papel del Partido del Trabajo de Corea en la construcción de un país "poderoso" que encarna las ideas y los ideales socialistas, así como su "contribución significativa en la implementación de la causa internacional por la independencia y justicia".
En su discurso con motivo del 80.º aniversario del partido gobernante de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), publicado por la agencia estatal KCNA, Kim se mantuvo fiel a sus políticas y prometió hacer de su país "el mejor paraíso socialista del mundo".
"Seguramente convertiré este país en una tierra más próspera y hermosa y en el mejor paraíso socialista del mundo, con la creencia en el pueblo que apoya a nuestro partido y uniéndome siempre con él en mente y cuerpo", destacó.
Reiterando su compromiso de trabajar más arduamente para estar a la altura de la confianza que depone en él el pueblo, Kim Jong-un subrayó que el Partido del Trabajo de Corea "no puede existir separado del pueblo".
También indicó que tanto el partido, como el Gobierno lidian con los "feroces movimientos políticos y militares de presión de los adversarios", viéndose obligados a adoptar contramedidas y responder con políticas más duras.
"Esto está impulsando poderosamente el crecimiento del bando progresista contra la guerra y la hegemonía, y el prestigio internacional de nuestra república como miembro fiel de las fuerzas socialistas y baluarte de la independencia y la justicia va en aumento con cada día que pasa", concluyó Kim.