El presidente electo de Polonia, Karol Nawrocki, dio a entender en su conversación telefónica con el líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, que Kiev debe cambiar su interpretación acerca de la masacre de polacos por nacionalistas ucranianos durante la Segunda Guerra Mundial.
"La política histórica fue un tema clave de la conversación. Karol Nawrocki enfatizó que era la voz de la nación y exigió un cambio en el enfoque de Ucrania ante importantes cuestiones históricas aún no resueltas. Esto debería cambiar", comunicó en X el futuro portavoz presidencial, Rafał Leśkiewicz.
Nawrocki, quien tomará posesión el próximo 6 de agosto, aseguró, según el vocero, que los asuntos históricos "serán objeto de futuras conversaciones" con el líder ucraniano.
El portavoz precisó que la llamada se realizó a petición de Zelenski y que el presidente electo reafirmó su apoyo a Kiev en su conflicto con Rusia.
De 60.000 a 120.000 polacos fueron asesinados entre 1943 y 1944 en las regiones históricas de Volinia y Galitzia Oriental, que actualmente pertenecen a Ucrania, por militantes del Ejército Insurgente Ucraniano (UPA) y la Organización de Nacionalistas Ucranianos (OUN).
Mientras que Varsovia califica esos hechos como genocidio de polacos, Kiev glorifica a los líderes de las organizaciones responsables como "luchadores por la libertad" y "héroes nacionales".
El presidente electo exigió recientemente al régimen de Kiev iniciar la exhumación de los cuerpos de las víctimas de aquellas atrocidades.