Reportan que FTX estaba dirigido por "una banda de niños en las Bahamas"
El funcionamiento de la plataforma de compraventa de criptomonedas FTX, que este viernes inició el proceso para declararse en quiebra, estuvo dirigido por "una banda de niños en las Bahamas", informa CoinDesk citando a fuentes familiarizadas con el asunto.
CoinDesk entrevistó a varios empleados actuales y extrabajadores de esa criptobolsa, que, según el medio, se gestionaba desde un ático de lujo situado en las Bahamas, país insular en el Caribe. Estos aseguran que era un lugar lleno de conflictos de intereses, nepotismo y falta de supervisión.
Allí convivían diez personas, incluido Sam Bankman-Fried, cofundador y exdirector general de FTX, la mayoría de ellas excolegas de trabajo de la firma de comercio cuantitativo Jane Street. Pero también había gente a la que Bankman-Fried conoció durante su paso por el Instituto de Tecnología de Massachusetts.
De hecho, los diez mantienen, o solían mantener, relaciones románticas entre sí, incluido el propio Bankman-Fried y Caroline Ellison, directora ejecutiva de Alameda Research, empresa que desempeñó un papel central en el colapso de la mencionada plataforma.
"Harán cualquier cosa"
"Harán cualquier cosa el uno por el otro", dijo una de las personas que habló bajo condición de anonimato.
Otra fuente, que tampoco quiso revelar su identidad, explicó que Gary Wang, cofundador y director de tecnología de FTX, Nishad Singh, director de ingeniería, y Ellison controlaban el código, el motor de comparación de intercambio y los fondos. "Si los movieron o ingresaron sus propios números, no estoy seguro de quién se daría cuenta", afirmó.
Una tercera persona dijo que se les mantuvo desinformados sobre los eventos de la semana pasada, detallando que solo el círculo íntimo de Bankman-Fried pudo haber tenido conocimiento de lo que estaba ocurriendo.
"Cuando vimos el tuit de CZ [Changpeng Zhao] que decía que Binance iba a comprar FTX, honestamente pensamos que era falso. Pero luego el tuit de Sam lo confirmó", comentó, asegurando que algunos de los empleados de la empresa tenían invertidos los ahorros de toda su vida en la bolsa de criptomonedas porque confiaban en que todo estaba bien.